Iba tras su destino.
En el trayecto se encontró con diversos seres,
No con todos tuvo contacto,
Cada uno de ellos le regaló un filtro de color que debía usar en sus ojos.
Algunos lo hicieron por amor,
Otros por agradecimiento,
Incluso por esperar algo a cambio o por resentimiento.
Ella los recibió y aprendió que cada pasante cumplía un rol en su crecimiento.
Al descubrir que el mundo podía ser de colores nuevos y que estos cambiaban todo el tiempo supo que debía tener una actitud receptiva y tuvo que aprender a proyectar algunos de ellos según la ocasión.
Pero también se dio cuenta de que faltaban aun muchos colores por conocer.
En ese momento concluyó que aun hay mucho por recorrer.
Pero espera!!
Hormiguita… es que no te has dado cuenta que tu también puedes compartir con otros los colores que has recibido??
Seres pueden estar esperando por ese privilegio. Seres pueden necesitar descubrirlos.
Para hacerse grandes.
Para hacerse fuertes.
Para que quizás algún día uno de ellos pueda caminar contigo.
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